El pasado jueves 1 de diciembre, el Congreso aprobó la Ley de Startups, la primera normativa que regula la actividad de las empresas emergentes.
El proceso legislativo se inició en 2018, con la apertura del trámite de consulta pública y, tras cuatro años, la ley ha sido aprobada definitivamente. Es una de las medidas prioritarias de la Estrategia España Nación Emprendedora, la cual introduce numerosas medidas para impulsar la creación y desarrollo de empresas emergentes, al igual que fomenta la atracción y retención de talento.
Algunas de las medidas que incluye esta normativa son las siguientes:
- Una mejora en el tratamiento fiscal de las stock options (opciones sobre acciones), como incentivo para atraer y retener a profesionales de empresas emergentes;
- La bonificación de cuotas en favor de trabajadores autónomos en empresas emergentes en situación de pluriactividad durante tres años;
- Incentivos fiscales y reducción de trámites burocráticos para business angels y fondos de inversión extranjeros
En este último trámite, se han incluido las enmiendas transaccionales como la siguiente: se fortalece la figura del emprendedor en serie (aquellos que han creado más de una startup) al no poner un número límite máximo de empresas que puede construir una persona para ser beneficiario de las medidas establecidas en la nueva ley.
Las empresas que son susceptibles de beneficiarse de esta nueva ley deben cumplir los siguientes requisitos:
- Ser una compañía de nueva creación con un máximo de 5 años de antigüedad (7 en algunos sectores estratégicos)
- Tener su sede social en España
- Desarrollar un proyecto de emprendimiento innovador con un modelo de negocio escalable.